Las Velas y su Poder

Al encender una vela ponemos en marcha un ritual de palabra, fuego y color. Las velas tienen una fuerza muy poderosa y nos ayudarán a conseguir lo que nos proponemos al quemarlas e invocar a los Santos y a las fuerzas de la naturaleza, porque junto con agua, fuego, tierra y aire, nosotros cerramos el círculo como el quinto elemento para conseguir, a través de los rituales todo aquello que nos propongamos.

Existen muchos tipos de velas o velones, pudiendo tener diferentes formas. Además las velas pueden llevar incorporadas o le incorporaremos o ungiremos aceites, polvos o hierbas, con lo que fortaleceremos el Ritual.

LAS VELAS O RITUALES PARA ATRAER ALGO

Las encenderemos en luna creciente o llena, mientras que para limpiar o alejar, las pondremos en luna menguante o nueva.

El hombre nunca ha perdido el sentido mágico de la existencia, ya sea de una u otra manera ha mantenido su mente pendiente del firmamento, de las estrellas, de la naturaleza y de Dios.

De esta forma, el hombre siempre ha reconocido el fuego como una manifestación divina y sabe en su interior que el fuego es la puerta que ha de abrirle el sendero hacia la iluminación.

En la magia de las velas se deben escoger bien el día, la hora, el planeta, el signo del zodiaco, el santo protector y su oración. Nada ha de quedar al azar.

CONSEJOS A SEGUIR EN LOS RITUALES CON VELAS

El uso tradicional de las velas es muy conocido. Se puede encender una vela para eliminar los malos olores, para celebrar un acontecimiento, para una cena romántica, cuando carecemos de luz eléctrica, etc. También es común el uso de las velas en toda clase de iglesias y religiones, pero el uso que le daremos nosotros a las velas es completamente devocional y mágico, por lo que deberemos observar una serie de pautas básicas:

1) Tomar conciencia clara del cómo, del cuándo y del porqué, antes de encender una vela.

2) Definir claramente si el trabajo mágico o el deseo o petición es para uno mismo o para otra persona.

3) Si es para otra persona, es indispensable contar previamente con su aprobación y con su deseo. De no ser así incurriríamos en un error básico dentro de lo que es un ritual de Magia Blanca y nuestro trabajo seria en vano, nulo e incluso nocivo, tanto para la persona como para nosotros mismos.

4) Escoger minuciosamente el día, la hora, el planeta, el signo zodiacal, el santo protector, la oración y el color de la vela correspondiente, dependiendo del deseo o la cuestión a formular.

5) Tener presente que la vela puede trabajar como método de protección, o bien como una ayuda para alcanzar un deseo, para cualquier enfermedad o simplemente para pedir luz y guía en nuestro vivir diario.

6) Tomar conciencia de que el uso de las velas o veladoras no es un juego y que por ello no hay que abusar de ellas. Lo que podemos solucionar a través de nuestros esfuerzos personales no requiere ayuda mágica de ningún tipo.

7) Encender una vela es un ritual mágico, es abrir una puerta, es invocar a unas fuerzas divinas y recurrir a unos entes superiores a los cuales deberemos recurrir solo en caso de verdadera urgencia.

Mas vale dar que recibir y cada vez que pedimos y nos es dado, debemos ser conscientes de que a nuestra vez tendremos que corresponder en su justa medida, por ello no pidas más de lo que necesitas y de lo que puedas devolver.